La Virgen de los Dolores, patrona de Montán (Castellón), es una imagen para vestir que tiene en sus brazos la de Cristo muerto y como fondo la cruz, de la que pende un blanco sudario. Tallada en madera, mide 175 cm de altura y es obra del artista Federico Siurana Vila, natural de la localidad valenciana de Castellar.

Se celebran fiestas patronales en su honor entre los días 15 y 23 de septiembre. El día 15, desde las 21:30 horas, tiene lugar el traslado de la imagen del templo parroquial de San Bernardo, donde recibe culto, al antiguo Convento de los Servitas. Al día siguiente, a partir de las 19:00 horas, procesiona por las calles principales de la villa; seguidamente, se produce una popular ofrenda de flores. A modo de curiosidad, el madero del simulacro lleva un simulacro del Espíritu Santo en forma de paloma, rodeado de rayos.

La Dolorosa, sedente sobre peana rocosa, eleva llorosa la mirada al cielo. Los labios aparecen abiertos, como dejando escapar un lamento. Se exorna con vistosa corona, manto negro bordado en oro y corazón con siete puñales que lleva sobre el pecho. Viste tocado de tipo monjil que solo permite contemplar la mascarilla y parte de los cabellos tallados a la altura de las sienes. La mano derecha, cubierta de rosarios, sujeta la cabeza del Hijo, mientras la derecha eleva su brazo izquierdo al tiempo que sujeta un blanco pañuelo de encaje.

A diferencia de la efigie mariana, el Cristo es una talla completa que cubre su desnudez con sudario de aristados pliegues. Su frente aparece muy lacerada por los pinchos de la corona, si bien carece de ella. En la mano izquierda porta, atado con un cordoncillo, el bastón de alcaldesa que la Señora ostenta por su patronazgo.