Bajo este epígrafe podemos enmarcar un conjunto de Niños Jesús del Museo del Santo Ángel. Presentan rasgos de algunos de sus imagineros que trabajaron en el Setecientos, como son Andrés de Carvajal (Fondón, Almería, 1709 - Antequera, Málaga, 1779) o Diego Márquez (Antequera, Málaga, 1724-1791).

Con Andrés de Carvajal se ha relacionado el hermoso Niño de las Lágrimas, una talla en madera de gran tamaño, que sujeta la cruz en su mano izquierda en dinámica posición y la corona de espinas en la derecha. Los rasgos de sus rostros, de sonrosadas y abultadas mejillas, nos llevan a la obra de Carvajal, aunque luego el tratamiento del cabello es diferente. Hay algo de su huella, pero también algo distinto. Su peana muy original podría arrojar un poco de luz, en el tipo de querubines que se entrelazan en la nube.

Por otra parte, hay dos Niños, elaborados en terracota policromada, el Niño de las Penas (imagen superior) y el Niño del Amor (imagen inferior), que comparten rasgos similares en el tratamiento de los cabellos y en su anatomía, que también sugieren el estilo de la escuela antequerana, concretamente el de los Márquez, más a Diego Márquez que a su hijo Miguel Márquez, ya que pueden datarse en el segundo tercio del XVIII.

Las expresiones sentidas de sus rostros nos acercan a imágenes de Diego Márquez, por ello es necesario seguir analizando estas piezas que a veces se ponen en relación con otros autores, ya que en el tema de los Niños Jesús se entremezclan influencias diversas. En estos Niños incluso parece verse algo de la producción de las Hermanas Cuetas de Montilla (Córdoba). Poco a poco, con la ayuda de todos los investigadores, se podrá ir delimitando el estilo y los rasgos de cada escuela o taller.