María Santísima de la Salud es la imagen de la Madre Dolorosa que ha recibido culto siempre en el Santo Ángel. Los datos más antiguos que tenemos datan de González de León en 1844. Recientemente se ha apuntado si pudo proceder de una corporación que residía en la iglesia de los Terceros y que se fusionó con una hermandad llamada de la Concordia Espiritual residente en el Santo Ángel. Se trata de una bellísima Dolorosa atribuida con fundamento al escultor Juan de Astorga (1777-1849), que debió realizarla en torno a 1820, por el parecido con los rasgos formales de otras imágenes sevillanas sobre la misma iconografía realizadas por el escultor esos años, como la Virgen de la Angustia, de los Estudiantes, y la Virgen del Buen Fin, de la Sagrada Lanzada. Los rasgos del rostro y en especial las manos delatan el estilo de este escultor que consagró el modelo de imagen de la Madre Dolorosa del arte hispalense. Fue restaurada durante los meses de febrero y marzo de 2009 por Francisco Romero Zafra, una intervención que consistió principalmente en eliminar repintes y recuperar la policromía original. Conserva la imagen un apreciable ajuar de sayas y mantos con bordados antiguos, así como una interesante corona decimonónica y una nueva pieza de plata sobredorada del orfebre José Manuel Bernet en 2019. Es titular de la Asociación que rinde culto al Cristo de los Desamparados y celebra sus cultos y besamanos en los días previos a la fiesta de la Inmaculada Concepción.